El compresor de aire acondicionado es un componente clave del sistema de aire acondicionado. Comprime y hace circular el refrigerante para enfriar el aire del habitáculo, y normalmente se acciona por correa mediante el motor.
Un compresor de aire acondicionado de automóvil puede necesitar ser sustituido debido al desgaste, la contaminación o un fallo mecánico. Dado que es una pieza móvil crítica en el sistema de aire acondicionado, sufre tensiones con el paso del tiempo. Aprende a qué síntomas debes prestar atención y encuentra una guía práctica paso a paso para técnicos sobre cómo sustituir uno.
Así funciona el compresor del aire acondicionado de un coche. El compresor comprime el gas refrigerante, aumentando su presión y temperatura. A continuación, el gas caliente a alta presión pasa al condensador, donde libera calor y se convierte en líquido a alta presión.
El refrigerante líquido fluye a través de la válvula de expansión, donde se enfría y se convierte en gas a baja presión. Una vez enfriado, el refrigerante frío absorbe el calor del aire del habitáculo a través del evaporador, enfriando el aire antes de ser expulsado al habitáculo.
Por último, el ciclo se repite, proporcionando refrigeración continua cuando es necesario.
Estas son las señales a las que debes prestar atención para saber si algo va mal en tu compresor:
Si se detecta uno o varios de estos síntomas, sigue siendo útil diagnosticar el problema con mayor profundidad. Sigue estos pasos:
Comprueba el funcionamiento básico del aire acondicionado - Arranca el vehículo y enciende el aire acondicionado al máximo. Comprueba la temperatura con las especificaciones del fabricante (aproximadamente 20 °C de descenso con respecto a la temperatura ambiente como mínimo para la mayoría).
Inspecciona el embrague del compresor de aire acondicionado - Localica el compresor de aire acondicionado, normalmente en la parte delantera del motor. Con el aire acondicionado encendido, comprueba si el embrague del compresor está engranado. Si el embrague no se acopla, o lo hace pero el aire no está frío, es una clara señal de que hay un problema. Este es un paso sólo para algunos vehículos que tienen 10 años o más.
Comprueba la presión del refrigerante - conecta manómetros de baja y alta presión a los puertos de servicio del aire acondicionado y compara las lecturas con los niveles recomendados. Si las lecturas de presión alta o baja están muy desviadas, es señal de que algo va mal.
Escucha si hay ruidos extraños - Con el aire acondicionado en marcha, escucha si el compresor rechina, chirría o traquetea.
Busca fugas o contaminación - Busca manchas de aceite o fugas de refrigerante alrededor del compresor. Si es necesario, puedes utilizar un kit de detección de fugas con tinte UV.
Comprueba las conexiones eléctricas y los fusibles - Inspecciona el relé de CA y el fusible. Utiliza un multímetro para comprobar la tensión en el compresor.
Aquí encontrarás una guía completa paso a paso para cambiar el compresor de aire acondicionado de un vehículo.
Algunas personas se preguntan "¿puedo cambiar yo mismo un compresor de aire acondicionado?" La respuesta es: sustituir el compresor de aire acondicionado de un coche requiere conocimientos de mecánica de nivel intermedio a avanzado, ya que implica manipular refrigerante a presión, conexiones eléctricas y un sellado adecuado. La cualificación pertinente también es necesaria si el vehículo contiene R134a, y el sistema debe recuperarse por completo antes de realizar cualquier trabajo. Por estas razones, un técnico cualificado es el más indicado para hacerlo.
Esta es una lista básica de herramientas y piezas que necesitarás para cambiar un compresor de aire acondicionado:
Si la instalación no sale según lo previsto, aquí tienes algunos de los problemas más comunes que puedes experimentar y cómo solucionarlos.
Comprueba primero si hay problemas eléctricos. Comienza con el fusible, el relé y el cableado al control del compresor. Pero lo más importante es comprobar también que el sistema está correctamente cargado de refrigerante. Muchos compresores no se activan si el sistema está vacío o con baja presión debido al presostato de baja presión.
Los ruidos importantes suelen deberse a dos causas: falta de lubricación o instalación incorrecta. Asegúrate de que el compresor se ha precargado correctamente con aceite y de que es compatible con su sistema. Los pernos de montaje sueltos o una correa desalineada también pueden causar ruido.
La razón más común es que haya una fuga de refrigerante en alguna parte del sistema. Los puntos de fuga más comunes son el condensador, las juntas tóricas y las mangueras. Compruebe también que la válvula de expansión o el tubo de orificio no estén obstruidos y que el sistema se haya vaciado completamente antes de la carga.
Esto suele ocurrir porque en el sistema han quedado restos del compresor antiguo. Un lavado completo del sistema es esencial para proteger el nuevo compresor - véase el paso 1 anterior.
Esto puede deberse a una carga incorrecta de refrigerante, a presostatos defectuosos o a un sensor que no funciona correctamente. En primer lugar, comprueba los niveles de carga y, si sigue teniendo problemas, busque códigos de avería si su vehículo tiene un sistema de aire acondicionado moderno.
En los sistemas de tubo de orificio, instale un tubo de orificio nuevo. En los sistemas con válvula de expansión, limpia la rejilla de entrada de la válvula de expansión o sustituya la válvula de expansión.
No necesariamente. El compresor es un componente principal, pero el sistema de aire acondicionado tiene varias piezas que pueden fallar o causar un rendimiento deficiente. Incluso con un compresor nuevo, problemas como válvulas de expansión obstruidas, fugas en el condensador o las mangueras, fallos eléctricos o un motor del ventilador defectuoso pueden impedir que el aire acondicionado funcione correctamente.
No existe un intervalo estándar para sustituir un compresor de aire acondicionado. Es una cuestión de cuánto desgaste acumula el sistema, más que de kilometraje. Pero, por término medio, un compresor bien mantenido puede durar 8 a 10 años o más Factores como la falta de uso, la humedad en el sistema, un mantenimiento deficiente o el funcionamiento del aire acondicionado con poco refrigerante pueden reducir su vida útil.
Sustituir un compresor de aire acondicionado suele llevar un par de horas, dependiendo de la marca, el modelo y la disposición del motor. Algunos coches pequeños ofrecen un acceso fácil, mientras que otros pueden requerir que retire otros componentes sólo para llegar al compresor.
Sí, en la mayoría de los casos el coche puede seguir circulando con un compresor de aire acondicionado averiado, siempre y cuando el compresor no esté gripado y la correa siga intacta. Sin embargo, el aire acondicionado se está convirtiendo en un componente esencial del funcionamiento de los vehículos eléctricos y ha dejado de ser un elemento de comodidad.
En muchos vehículos puede ser necesario reiniciar el módulo de control HVAC o borrar códigos de avería. Algunos vehículos almacenan códigos de error cuando el sistema detecta problemas como baja presión o fallos del sistema, lo que puede impedir que el nuevo compresor se active incluso después de la instalación. Algunos coches también requieren que se vuelva a calibrar el sistema de climatización después de una reparación importante del aire acondicionado. Consulta siempre el manual del vehículo o utiliza una herramienta de escaneado para asegurarte de que el sistema se reinicia correctamente.
Sí, se lo recomendamos encarecidamente. Estos componentes ayudan a filtrar los residuos y absorber la humedad. No sustituirlos puede contaminar el nuevo compresor y provocar un fallo prematuro.
Un exceso de aceite puede reducir la eficiencia de refrigeración y dañar el compresor. Los síntomas incluyen una refrigeración deficiente y altas presiones en la culata. Si no estás seguro, consulta la tabla de capacidad de aceite del fabricante y drena el aceite sobrante si es necesario.
Sí, absolutamente. La aspiración elimina la humedad que puede congelarse y bloquear el sistema o provocar corrosión. Saltarse este paso puede reducir significativamente el rendimiento y la vida útil del sistema de aire acondicionado del vehículo.
No directamente, ya que el refrigerante puede estar contaminado con residuos o humedad. Recupera, recicla y recarga siempre el sistema con refrigerante para garantizar el mejor rendimiento y proteger los nuevos componentes.
El lavado es crucial para eliminar el aceite viejo, los contaminantes y los residuos. Si no se hace, pueden dañar rápidamente el nuevo compresor. Utiliza un disolvente de lavado de CA aprobado y limpia bien los conductos antes de volver a montarlos.
Preparar y limpiar el sistema de aire acondicionado
Asegúratede que el sistema de aire acondicionado está limpio: se recomienda lavar el refrigerante en circuito cerrado. Si se utiliza lavado químico, todos los agentes de lavado químico deben eliminarse del sistema.
No introduzcas aditivos (selladores o tratamientos del sistema) en el sistema de aire acondicionado. Los colorantes de detección de fugas, en cantidades adecuadas, están bien.
Utiliza sólo el aceite correcto para el sistema.
Sustituir componentes
Añadir aceite al compresor del aire acondicionado
Comprobar fugas
Si el sistema no contenía inicialmente la cantidad correcta de refrigerante, debe comprobarse la estanqueidad utilizando nitrógeno sin oxígeno o similar para demostrar que el sistema no tiene fugas antes de añadir refrigerante de sustitución.
Comprueba la estanqueidad de todo el sistema de aire acondicionado: la sustitución de un compresor puede no corregir la fuga del sistema que causó el fallo anterior del compresor.
Comprobar la evacuación y la carga
Conecta la estación de servicio AC, ejecuta la rutina de servicio completa especificando correctamente el tipo y la cantidad de refrigerante según la etiqueta del vehículo o los datos del fabricante.
La evacuación y la carga precisas son esenciales.
Comprobar interruptor de ciclo
Confirmar el funcionamiento del sistema de CA
Confirma el rendimiento del sistema de aire acondicionado del fabricante OEM: el compresor no es el único factor que contribuye al rendimiento del aire acondicionado.
Si el sistema ha estado abierto durante un periodo de tiempo, o se desconoce la antigüedad de los componentes, instala en el vehículo un secador receptor o deshidratador acumulador nuevo o equivalente al OEM.
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