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El sistema de frenos es el principal sistema que garantiza la seguridad en cualquier vehículo: de ahí que sea tan importante realizar el cambio de pastillas de freno.
Pero, ¿cuándo es recomendable hacerlo?
En este artículo aprenderás a identificar el momento para cambiar las pastillas de freno y así evitar accidentes.
¿Qué son y para qué sirven las pastillas de freno?
Las pastillas de freno son una pieza clave del sistema de frenado que sirven para reducir la velocidad o detener el vehículo.
Al accionar el pedal de freno, las pastillas presionan el disco y la energía cinética se transforma en calor; esto es lo que produce la deceleración controlada de velocidad.
De ahí que sea tan importante monitorizar su desgaste y mantenerlas en buen estado.
Tipos de pastillas de frenos, ¿cómo influye el material de esta pieza?
Debido a que el material determina su comportamiento y durabilidad, es necesario conocer de que están hechas las pastillas de freno:
Orgánicas: combinan fibras sintéticas y resinas, y destacan por su buena respuesta inicial y bajo nivel de ruido, pero no resisten temperaturas muy altas.
Semi-metálicas: hechas de fibras metálicas como cobre o acero. Mejoran la disipación térmica y la durabilidad, pero generan más polvo y ruido.
Cerámicas: compuestas por fibras cerámicas y materiales de relleno, resisten muy bien al desgaste y a las altas temperaturas, además de ser ultra silenciosas.
¿Cuánto duran las pastillas de freno?
La respuesta a cuánto dura una pastilla de freno es que depende del tipo de conducción, el peso del vehículo y el entorno de uso.
Pero una orientación de en qué kilómetros cambiar las pastillas de freno es:
Las delanteras, a los 30.000-45.000 kilómetros.
Las traseras, a los 60.000 kilómetros como máximo.
Señales de que es momento de cambiar las pastillas de freno
Si te preguntas cómo saber cuándo cambiar las pastillas de freno, éstas son las señales que te ayudarán a averiguarlo:
Ruidos anómalos
Fijarte en si suena un chirrido metálico al frenar es la mejor forma de saber el desgaste de las pastillas de freno, pues suele indicar que ya han llegado a su límite.
Pérdida de eficacia en la frenada
Si notas que el vehículo tarda más en detenerse o el pedal se hunde en exceso, es probable que el grosor de las pastillas sea insuficiente para garantizar una frenada segura.
Luz de advertencia en el tablero
Esta es una manera inequívoca de saber si tienes que cambiar las pastillas de freno, pues esta luz indica que las pastillas han alcanzado el umbral mínimo de grosor antes de que toque el disco (unos 2-3 mm).
Vibraciones o pulsaciones al frenar
Las vibraciones en el pedal o el volante al frenar pueden indicar desgaste irregular de las pastillas, o incluso problemas en los discos.
Cómo cambiar las pastillas de freno: paso a paso
Antes de sustituir unas pastillas de freno desgastadas, revisa cómo cambiar las pastillas de freno de manera profesional y segura.
Lo primero es asegurarte de contar con herramientas y material de seguridad: llave cruz, gato hidráulico, soportes de seguridad, llave Allen, destornillador y guantes de protección.
Una vez tengas todo, sigue estos pasos para cambiar las pastillas de freno:
Asegura el vehículo en una superficie plana, bloquea las ruedas y utiliza caballetes homologados para que no se mueva.
Afloja ligeramente los tornillos de la rueda antes de elevar el vehículo con un gato, para evitar que la rueda gire una vez arriba.
Retira la rueda para acceder al sistema de frenos.
Desmonta la pinza de freno y extrae las pastillas desgastadas.
Limpia la zona y comprueba el estado del disco.
Coloca las nuevas pastillas, comprueba que no se desplacen y que estén fijas, y engrásalas en los puntos de contacto para evitar ruidos.
Vuelve a montar la pinza y la rueda, apretando los tornillos al par recomendados.
Verifica la correcta alineación y fijación de todos los elementos antes de finalizar el montaje.
Antes de circular, bombea el pedal de freno varias veces para recuperar la presión hidráulica y asentar las pastillas.
Consulta nuestro vídeo para visualizar el proceso completo:
Preguntas frecuentes
A continuación, resolvemos algunas de las dudas más habituales sobre el cambio de pastillas y discos de freno.
¿Es necesario cambiar los discos al mismo tiempo?
Sólo es imprescindible cambiar discos y pastillas de freno juntos si los discos presentan desgaste excesivo, surcos profundos o han alcanzado el grosor mínimo recomendado por el fabricante.
¿Hay que alinear o rectificar al hacer el cambio?
No es necesario alinear el sistema tras el cambio de pastillas de freno, pero sí conviene revisar y, si es preciso, rectificar los discos si muestran irregularidades o vibraciones.
¿Qué hacer si el freno hace ruido tras el cambio?
Si tras cambiar las pastillas de freno detectas ruidos, revisa la instalación para comprobar que las pastillas están bien asentadas y corregirlo si es preciso. Si el ruido persiste, inspecciona el estado de los discos y la compatibilidad de las piezas.
¿Cada cuánto se cambian las pastillas de freno?
Ante la pregunta de cada cuánto se cambian las pastillas de freno, lo recomendable es revisarlas cada 20.000 kilómetros y reemplazarlas entre los 30.000 y 60.000 kilómetros, en función del uso y del estado de cada eje.
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